miércoles, enero 15

Querida 10 años mayor...


Querida 10 años mayor:

Sé que cuando leas esto vas a tener 28 años, y sí, te debes estar sonriendo, sonriendo porque las cosas han cambiado mucho estos últimos diez años ¿verdad? Ya no eres más una adolescente, ni siquiera podrías ser llamada joven (aunque tu apariencia lo diga), ahora eres una adulta, a punto de cumplir los 30 (¡wow!) 
¿Cómo estás? Pues ahorita yo estoy bien, y espero tu estés más que bien. Espero que al leer esto te rías.... 

Porque ahora quizás no sepa por qué algunas cosas pasaron o  por qué no. Para tener 18 años cumplidos, he pasado por cosas las cuales me he hecho un mundo y una persona diez años mayor se reiría por ello. Sí, he llorado, por mi inmadurez, por mi inocencia, por mi ignorancia... y bueno, cosas que son parte de la vida, porque por cada error cometido he ido creciendo  y gracias a eso ahora eres la mujer hecha y derecha que lee esto. Y sobre todo he reído, por las buenas y malas decisiones que he tomado conmigo misma o con los demás.

Sí, nadie nunca va a olvidar cómo he llorado tanto por el "primer amor" y ese tema, cómo crees que el mundo se te acaba porque un chico, el que tus ojos lo ven como el mejor, te dice que ya no te quiere y te lo demuestra de la peor manera. Tu corazón se rompe en mil pedacitos y sientes un vacío enorme, y ya no le encuentras sentido a nada ¿no? O peor aún, haces que ese chico juegue contigo porque "el primer amor nunca se olvida". Debes estar sonriendo, y esa sonrisa se lee en tus ojos porque sabes que al final no tuve razón en nada. Porque luego de diez años te diste cuenta de que el amor en la adolescencia es como un entrenamiento al amor verdadero, ya que el verdadero amor tú lo encontraste cuando creciste, cuando maduraste y cuando encontraste a alguien compatible a ti. A los 17 años tú no sentiste amor, tú sentiste enamoramiento, ilusión, pero con el tiempo aprendiste que el amor es más que eso... es compartir, es dar y recibir de la misma forma, es crecer juntos, respetarse en todas las formas, admirarse, apoyarse en las buenas y en las malas, ser compañeros.. el amor es inexplicable, es todo eso que tú sientes por ese chico que se te vino en mente al leer esto... y no puedes explicarle a los demás, porque la forma en que lo miras igual a la forma en la que  un ciego ve al mundo por primera vez. 

Y sí, también en estos diez años te arrepientes un poco de esa época de sufrir por un mal de amor, y aunque es parte de la vida, cómo te hubiese gustado decirle a esa pequeña inmadura de 18 años, "espera", que todo llega a su tiempo. Porque el rencor, la desesperación, la angustia que alguna vez pudo haber sentido se fue yendo con el tiempo. A las personas buenas les pasan cosas buenas, y  ese chico en el que estás pensando ahorita o quizás lo tengas al lado, sé que te hace una buena persona, y sobre todo, te hace feliz. Porque a pesar del tiempo transcurrido, tú sigues creyendo en el amor para siempre. Sé que en diez años, cuando veas a esas personas que tanto te hicieron daño, vas a entender el porqué nunca encajaron en tu vida. El tiempo tiene las mejores respuestas, solo espera. Y sé que a ese chico de tus sueños lo vas a encontrar, o ya lo encontraste. Sé que es tu media naranja, tu cómplice, y sí... tu primer y último amor. ¿Fui necia no? creyendo que otra persona era la única en el planeta y que era la indicada, pero con el tiempo aprendes que cada uno tiene trazado en su vida su propio camino, cada uno tiene sus propias piezas del rompecabezas que poco a poco, sin darte cuenta,  las vas ubicando para armarlo... pero hay una piecita que siempre te va a faltar... hasta que la encuentras... y es él (sí, el que tienes en tu mente), el que completa tu rompecabezas, y lo vas a saber, así como uno sabe cómo respirar, así vas a saber que él es el indicado, porque respirar y amarlo son dos cosas que vas a necesitar para vivir. Sé paciente. No seas pleitista. Llénalo de besos cómo si fuese el último día de su vida. Dile que lo amas. Hagan cosas fuera de la rutina. Hazlo reír. Jueguen. Tómense fotos. Viajen. Canten. Bailen. Sé tolerante. Ámalo con todas tus fuerzas, y agradécele. ¡Ah! y no pierdan el tiempo... ¡cásense! y ya es hora de tener hijos. PONTE LAS PILAS.

Cuando termines de leer esto anda con tu mami y mírala, han pasado 10 años, apuesto que ella es la primera en desear nietos. Ya eres una mujer, y eres lo que eres por ella, porque tú fuiste su obra maestra... así que qué esperas para devolverle ese lindo regalo que te hizo. Sí, debe estar viejita, ahora es tu turno de cuidarla, de llevarla a todos lados, de comprarle lo que quiera, de tenerle paciencia, de ayudarla, porque no es fácil envejecer, y peor con el carácter de mierda que te manejas... pero tenle paciencia, así como ella te tuvo. Cocínale, llévala al doctor, ayúdale a decorar la casa todas las navidades, anda con ella a elegir tu lista de regalos de novios, llámala y cuéntale todo... pero no cosas que la preocupen. Revisa que tome todas sus pastillas... y cuando lleguen los nietos, llévaselos hasta que se harte. Ámala, cada día más. Es el mejor agradecimiento que le puedes dar después de haber sido la mejor madre del universo. Igual a papá, oh... debe estar hartando a mamá (si no es que ya lo hizo), pero bueno, paciencia... paciencia... y más paciencia... aprende de ese carácter tan jodido para que no lo agarres tú. Engríelo, porque a pesar de tener 28 años, sé que sigues siendo su niña. Agradécele por su ejemplo de luchador y trabajador... y si puedes, regálale el Audi que tanto quiso. Cuando termines de leer esto, dales un beso a tus papás y hazlos leer esto, para que sepan que a pesar del tiempo, siguen siendo increíbles y  los mejores. Nunca tendré palabras para decirles cuánto los amo papis, así tenga 18, 28, o 68 años... los amaré por toda la eternidad.

Tantas cosas pueden pasar en 10 años. Cosas que nadie es capaz de entender, solamente Dios. Acuérdate que Dios no nos manda cosas que no podamos soportar. Sé fuerte, ten fe, se una luchadora y nunca dejes de ser feliz. Nunca pierdas contacto con los buenos amigos, (sé una buena tía), haz que tu prometido te pida la mano frente a tu mejor amiga, como ella te pidió. (Y si no lo ha hecho, ¡que lo haga! ¿Qué espera?). ¡Felicitaciones! por graduarte de la universidad, sé que te costó porque no fue fácil, pero todos sabemos que estudiaste lo que te apasionaba. Espero que estés trabajando en un lugar donde seas feliz, donde estés cómoda y puedas crecer como profesional y como persona. No dejes nunca de hacer deporte y comer saludable (¿lo estás haciendo no?) Acuérdate que debes cambiar tu carro a un automático, hacerte socia del club, ahorrar y viajar por todo el mundo. ¡Ahorra! ¡No te gastes todo tu sueldo en ropa! y cuida mucho de tu salud, eso es lo primero. Diviértete cada día como si fuese el último. No le tengas miedo a nada, ponte retos, persigue tus sueños. Nunca te rindas, porque sé que tú puedes, porque sabes que eres capaz de todo si confías en ti. Mantente fuerte. Haz que todas las perras se mueran de envidia y celos (que te besen el poto) por ti, y haz que cada chico que te hizo derramar una lágrima se arrepienta de la mujer hermosa que eres, porque VALES MUCHO. Nunca te rindas, NUNCA. Si te caes, levántate. Si necesitas una mano, acéptala, y si te vuelves a caer, vuélvete a levantar, porque eres fuerte, más de lo que te imaginas, eres MUY FUERTE MC, no te subestimes a ti misma, no sufras, sé feliz, porque la vida es bella. Yo sé que tú puedes.

La vida cada vez se va haciendo más difícil, pero sé que con la fuerte base que tienes como persona has sabido seguir adelante. Acuérdate que la gente cambia, pero solo los verdaderos amigos se van a quedar siempre contigo. Dios te va a mantener siempre rodeada de los mejores. Siempre va a existir gente de mierda queriendo hacerte sentir inferior, siempre la envidia te va a rodear, pero nunca olvides que eres de mantequilla, porque todo te resbala, que eres de acero, porque nada te afecta, y que nadie en este mundo, nadie es indispensable para ti. Tus acciones, tus pensamientos, todo lo que hagas, ofréceselo a Dios, porque solo por él haces las cosas. Sé que deben haber pasado muchas cosas buenas, pero también malas. Vas a derramar muchas lágrimas, vas a molestarte muchísimo, vas a querer que el mundo se acabe, pero solo me queda decirte: SAL ADELANTE. La vida no se trata de estar mirando atrás, la vida no se trata de reprocharla... mira hacia adelante, y si miras para atrás que sea de un recuerdo bello, que te saque una sonrisa o que te enseñe una lección. No le des vueltas a cosas que ya pasaron. No pienses tanto. Acuérdate que solo se vive una vez el día a día. No te olvides de ser fuerte, que nada te derrumbe, que nadie te hagas sentir menos, la vida es así, todo lo que ha pasado pasó porque tenía que pasar, no reproches a Dios nada y utiliza eso como un arma para ser cada vez más fuerte y más sabia. Aprende a sacarle lo bueno a todo lo malo, porque la experiencia es la maestra de la vida. Sé grande, sé la persona que tanto tus papás te enseñaron a ser. Da todo lo bueno de ti, para que solo te regresen cosas buenas. Ama a tu familia cada día más. Ama la vida. Ama a Dios, y nunca dejes de ser feliz.